El sello Empresa de confianza llega a las 4.000 empresas y profesionales anexos a la construcción
FREMM y Comunidad animan a los constructores, promotores y ciudadanos a buscar el distintivo en los servicios de instalación, reparación y acabado de obra. “Tu vivienda, en buenas manos” es el lema que mostrará el compromiso empresarial con la transparencia, diálogo y calidad ante los consumidores.
La Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (FREMM) y la consejería de Empresa, Economía Social y Autónomos, a través de la Dirección General de Consumo y Artesanía, amplían el sello de calidad "Empresa de confianza" a las pymes y profesionales que se dedican a la instalación, reparación y acabado de obra.
En total, 4.000 empresas y autónomos de la Región de Murcia que, con más de 10.000 trabajadores, atienden los servicios del metal relacionados con las instalaciones de gas, climatización, fontanería, electricidad, seguridad, contra incendios, ascensores, energías renovables, ahorro energético, puertas automáticas, telecomunicaciones, carpintería metálica y todo tipo de reparación de electrodomésticos.
Todos ellos suponen más del 60% de las empresas que intervienen en la construcción. Agrupadas en 14 gremios y asociaciones de FREMM, sus presidentes estuvieron presentes en el acuerdo que permitirá fomentar las buenas prácticas en materia de consumo en un ámbito tan relevante como el de la vivienda, tal y como expusieron en el acto de presentación tanto Sonia Moreno Martínez, directora general de Consumo y Artesanía, como el presidente de FREMM, Alfonso Hernández Zapata.
El presidente del metal afirmó que los empresarios y autónomos de FREMM son los primeros interesados en preservar los derechos de los consumidores en su continuo afán de mejora. Hernández Zapata destacó el lema de la propuesta, “Tu vivienda, en buenas manos”, porque garantiza la excelencia de unos servicios que influyen directamente sobre la calidad de vida, como son las instalaciones energéticas, telecomunicaciones, accesibilidad o seguridad en el hogar.
Sonia Moreno, por su parte, expresó que este distintivo permite “mejorar la confianza de los consumidores y dar un valor añadido a los servicios profesionales, garantizando un nivel de calidad que ayude a los clientes a realizar su elección”.
Entre los requisitos que exige el sello destacan la adhesión al Sistema Arbitral de Consumo y al Código de Buenas Prácticas; utilizar documentos y modelos prefijados que garantizan tanto los precios como los términos de la reparación o la compraventa en presupuestos previos; fijar claramente los plazos tanto para las operaciones como las reclamaciones; e, incluso, evitar una letra pequeña ilegible o que las llamadas telefónicas tengan un precio superior a la tarifa normal.
Tanto FREMM como la Comunidad Autónoma animan a los promotores, constructores y ciudadanos a buscar “Empresa de confianza” cuando precisen algún servicio relacionado con la instalación, reparación y acabado de obra.
Solidez a las empresas
Además de proyectar confianza ante los consumidores, el sello contribuirá a dar visibilidad a un sector muy diverso, pero de importancia estratégica como es la vivienda.
Fortalecerá, asimismo, la voz unánime de los empresarios y autónomos, que se mueven en torno a la construcción, ante las diferentes administraciones y el conjunto de la sociedad.
La adopción del Código de Buenas Prácticas en el sector será, por otra parte, la prueba palpable de su responsabilidad social corporativa, su compromiso de mejora del entorno.
Asimismo, el distintivo redundará positivamente sobre la economía circular, sostenibilidad y lucha contra la competencia desleal.
Para obtener el sello de calidad es necesario adherirse al Código de Buenas Prácticas, fruto de la colaboración entre FREMM y la Comunidad Autónoma. Un distintivo que ya acoge a los sectores de automoción y cerrajería.
